Psiquiatría

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Browsing Psiquiatría by Subject "Adulto Mayor"

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    La Importancia de las habilidades sociales en los programas intergeneracionales centrados en el adulto mayor: Revisión narrativa de la literatura
    (2023) Amaya Roca, Ana María; Durán Flórez, María Esperanza; Tutor temático: Téllez, José David; Tutor metodológico: Palacios Ariza María Alejandra
    La población de adultos mayores ha experimentado un crecimiento sostenido durante las últimas décadas, impulsado por el incremento en la esperanza de vida y la mejora en los servicios de salud a nivel global (1). Este fenómeno ha conllevado no solo a un aumento en la prevalencia de enfermedades no transmisibles, propias del envejecimiento, sino también a un conjunto de desafíos sociales y económicos que requieren una atención prioritaria. Los problemas que enfrenta esta población van desde el acceso a servicios de salud y la necesidad de apoyo para la realización de actividades cotidianas, hasta la inclusión social y la calidad de vida en la vejez. En Colombia, según datos oficiales del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), en 2021 se contabilizaban 7.107.914 adultos mayores de 60 años, lo que representaba el 13,9% de la población total del país. Se proyecta que para el año 2070 esta cifra aumentará al 32%, evidenciando un cambio demográfico importante que tendrá implicaciones en todos los ámbitos de la sociedad (2). Ante este panorama, resulta fundamental que la sociedad se prepare para garantizar un entorno que sea inclusivo y que atienda de manera efectiva las necesidades de los adultos mayores, no limitándose a la satisfacción de las necesidades básicas, sino también promoviendo su bienestar y calidad de vida. En línea con esta perspectiva, la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2007 lanzó la iniciativa de "Ciudades y Comunidades Amigables con las Personas Mayores", cuyo objetivo es promover entornos urbanos que faciliten la inclusión y participación activa de los adultos mayores en la vida social y económica, asegurando que se sientan valorados y respetados (3). Esta iniciativa destaca la importancia de adaptar las infraestructuras, los servicios y las 2 oportunidades de participación para que las personas mayores puedan vivir de manera autónoma y digna. La propuesta de ciudades amigables parte de un enfoque intergeneracional, que promueve la colaboración y el entendimiento entre diferentes generaciones. Este enfoque busca fomentar la solidaridad y la empatía, fortaleciendo los lazos sociales y creando una sociedad más inclusiva y cohesionada. A través de estos programas, se espera que las generaciones más jóvenes y las personas mayores puedan aprender unas de otras, construyendo una comunidad que valore y respete a todos sus miembros, independientemente de su edad. Esto contribuye a transformar la percepción de la vejez, viéndola como una etapa del ciclo vital llena de oportunidades para la autonomía, el crecimiento personal y la autorrealización (4). En este contexto, surgen los Programas Intergeneracionales (PI) como una estrategia efectiva para promover la interacción y el entendimiento mutuo entre personas de diferentes edades. Los PI se definen como intervenciones planificadas que involucran a distintos grupos etarios en actividades colaborativas, con el objetivo de generar beneficios recíprocos. Estas iniciativas no solo brindan oportunidades para que los adultos mayores se sientan integrados y valorados, sino que también permiten a los más jóvenes adquirir conocimientos, habilidades y valores de la experiencia de las generaciones mayores. Una revisión sistemática de la literatura realizada por Dickens y colaboradores mostró que el 79% de las actividades intergeneracionales tuvieron un impacto positivo en dominios como la salud física, la salud mental y el bienestar social, destacando especialmente aquellas actividades que eran de carácter participativo y colaborativo (5). . Este hallazgo 3 evidencia el potencial de los PI como una herramienta para fortalecer las habilidades sociales de los adultos mayores, ayudándoles a superar las barreras de comunicación y relación que pueden surgir con el envejecimiento. Al participar en estas actividades, los adultos mayores tienen la oportunidad de mejorar su autoestima, ampliar sus redes sociales y mantener un sentido de propósito y pertenencia en la comunidad. En conclusión, el envejecimiento de la población es un fenómeno que plantea retos significativos, pero también ofrece la oportunidad de construir sociedades más inclusivas y solidarias. A través de estrategias intergeneracionales y la creación de entornos amigables para los adultos mayores, podemos fomentar un envejecimiento saludable, funcional y digno, asegurando que esta etapa de la vida sea vista como un periodo valioso y lleno de posibilidades para la participación y el desarrollo personal.